Las Fuerzas Regulares Indígenas fueron creadas por España en el que luego fue su Protectorado en Marruecos en el año 1911, pero desde casi 400 años antes los monarcas españoles contaron para la defensa de sus posesiones africanas con el concurso de tropas reclutadas entre los indígenas. En la presente obra, tras exponer sus inicios al servicio tanto de España como de Portugal a partir de la conquista de Orán, se estudia su devenir a lo largo de cuatro siglos de historia bélica intensa, durante los cuales, ya como Mogataces, Tiradores de Ceuta o Rif, o como Milicia Voluntaria de Ceuta, centenares de soldados procedentes de los países que hoy día conforman Marruecos, Argelia e incluso Túnez , como mayor o menor fortuna, sirvieron en los ejércitos españoles, derramando su sangre por un país que ellos consideraban como suyo, como lo demuestra el hecho de que cuando Orán y Mazalquivir se entregaron al Bey de Argel, la mayoría de los componentes de la Compañía de Mogataces escogiesen seguir sirviendo a España, fuera de sus tierras de origen.
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