Retrato de Gisèle Gautier, una mujer forjada a sí misma en París tras su paso por un orfanato de Luxemburgo. Detrás de él se esconde una realidad ciertamente aprendida, aunque no siempre asimilada: la vida también posee dos manos, y se vale de ambas
Este sitio web utiliza cookies, tanto propias como de terceros, para mejorar su experiencia de navegación. Si continúa navegando, consideramos que acepta su uso. Más información