EL BUQUE ESCUELA GALATEA.

EL BUQUE ESCUELA GALATEA. "UN GUIÑO AL PASADO" .

Editorial:
LE MONITEUR
Año de edición:
ISBN:
978-84-937397-8-2
Páginas:
204
Encuadernación:
Otros
-5%
17,00 €
16,15 €
IVA incluido
SIN STOCK

Arminio Sánchez Mora nos presenta la historia de un buque legendario: El Galatea. Nació como mercante pero vivió como escuela de maniobra de la Armada.

En él se relata no sólo su historia sino también las vivencias que tuvieron lugar, situaciones reales, impresiones, alegrías, tristezas, anécdotas… vividas y contadas por quienes formaron parte de sus dotaciones, jóvenes e intrépidos tripulantes.

Un grupo de marinos nostálgicosy apasionados, en colaboración con el autor, han hecho realidad este libro; sin ellos y su pasión encendida por el Galatea no hubiera sido posible.

Esta historia constituye, en sí misma, un homenaje al Galatea, a todos los hombres que pasaron por él y, por ende, a la Armada. A él se ha sumado con orgullo esta editorial llevando a cabo su publicación.

Buque Galatea

0 stars -
el 23.04.2013 Por

Hola Arminio, decirte que ya tengo en mi poder, Un guiño al pasado. Enhorabuena y me ha parecido fantástico, o mejor dicho me está pareciendo, pues aún no he acabado de leerlo.
También te agradezco que hayas puesto las fotos mías, en la página 185. La foto que estamos con los ojos tapados, fué el día del Carmen, Felix Gil Olmedo, de Valladolid, y Yo, dándonos chocolate.
bueno no te aburro más y gracias. Un abrazo.


El Galatea

0 stars -
el 23.04.2013 Por

Bueno, pues ya he leido el libro de Arminio, Un Guiño al Pasado. Una gozada, pero aún más para los especialistas de maniobra, la marinería por excelencía. Para mi, que soy de Artillería, hay una terminología que me resulta familiar, pero que no conocía bien.
Felicitar a Arminio, porque se lo difícil que resulta ordenar las ideas para escribir un libro y además recabar tantísimo dato. Digo que sé la dificultad que entraña, porque yo escribo en un simple blog, sobre vivenvias personales y me cuesta horrores hilvanar la trama. Hablar resulta más fácil.
Hombre... las sopas de ajo. Hasta hace poco no sabía que eran una antigua tradición en la Armada. Lo cierto, que aún no siendo exquisitas, si eran reconfortantes a media noche, después de una larga guardia en alta mar.
Está visto que nadie escarmienta por cabeza ajena, pues eso de arrojar patatas al mar y luego quedar delatados por que flotaban, también nos ocurrió a nosotros en 1.962.
Conocí muchas novatadas, pero desconocía esa de pedir al oficial de guardia ser apuntado en la lista de los bocadillos. Me he reido mucho, pero: ¡Que putada!. Sobretodo por la cara de gilipollas que se le quedaría al individuo. De momento, saludos a todos.


Añadir comentario

Buque Galatea

Por Antonio el 23/04/2013

Hola Arminio, decirte que ya tengo en mi poder, Un guiño al pasado. Enhorabuena y me ha parecido fantástico, o mejor dicho me está pareciendo, pues aún no he acabado de leerlo.
También te agradezco que hayas puesto las fotos mías, en la página 185. La foto que estamos con los ojos tapados, fué el día del Carmen, Felix Gil Olmedo, de Valladolid, y Yo, dándonos chocolate.
bueno no te aburro más y gracias. Un abrazo.


El Galatea

Por Manuel el 23/04/2013

Bueno, pues ya he leido el libro de Arminio, Un Guiño al Pasado. Una gozada, pero aún más para los especialistas de maniobra, la marinería por excelencía. Para mi, que soy de Artillería, hay una terminología que me resulta familiar, pero que no conocía bien.
Felicitar a Arminio, porque se lo difícil que resulta ordenar las ideas para escribir un libro y además recabar tantísimo dato. Digo que sé la dificultad que entraña, porque yo escribo en un simple blog, sobre vivenvias personales y me cuesta horrores hilvanar la trama. Hablar resulta más fácil.
Hombre... las sopas de ajo. Hasta hace poco no sabía que eran una antigua tradición en la Armada. Lo cierto, que aún no siendo exquisitas, si eran reconfortantes a media noche, después de una larga guardia en alta mar.
Está visto que nadie escarmienta por cabeza ajena, pues eso de arrojar patatas al mar y luego quedar delatados por que flotaban, también nos ocurrió a nosotros en 1.962.
Conocí muchas novatadas, pero desconocía esa de pedir al oficial de guardia ser apuntado en la lista de los bocadillos. Me he reido mucho, pero: ¡Que putada!. Sobretodo por la cara de gilipollas que se le quedaría al individuo. De momento, saludos a todos.


Añadir comentario
">