Pedro y Luisito se quedan solos con su tío Ambrosio en un viejo caserón. Sucede que, aun siendo mayor, no puede distinguir si lo que creyó en su infancia (la momia Regina) existió o fue producto de su fantasía.
Este sitio web utiliza cookies, tanto propias como de terceiros, para mellorar a súa experiencia de navegación. Si continúa navegando, consideramos que acepta o seu uso.Máis información