Tras toda una vida consagrada al mundo del crimen, Don Raymonde Aprile decide ceder el testigo al joven Astorre, su mano derecha, y mantener a su familia al margen de la Mafia. Sin embargo, el agente Cilke, del FBI, ve con recelo su jubilación.
Este sitio web utiliza cookies, tanto propias como de terceiros, para mellorar a súa experiencia de navegación. Si continúa navegando, consideramos que acepta o seu uso.Máis información