La felicidad se ha convertido en la gran ilusión de la filosofía. Actualmente son muchos los filósofos que se dedican a ensalzar el buen vivir y a cantar las alabanzas de una vida filosófica. Prometen a quienes quieran escucharlos que la filosofía los hará felices.Ese viejo sueño es un espejismo nefasto, ya que la filosofía no es la llave para la felicidad. Criticar una a una las supuestas evidencias y desmontar sus subterfugios son tareas urgentes. Y eso es lo que nos propone Roger-Pol Droit en este ensayo incisivo, polémico, pedagógico y sólidamente argumentado.