El libro aborda los problemas teológicos que surgen de la práctica del exorcismo. Es un libro, por lo tanto, centrado en los problemas reales. Y es precisamente a través de estos problemas, como en estas páginas se ha construido una teología acerca del exorcismo. Y lo es precisamente porque trata de las desviaciones, problemas y deformaciones, es por lo que tiene ese título. En estos capítulos se intenta analizar las tinieblas que, en ocasiones, se mezclan con la acción de Dios a través de los hombres. Esta obra, esencialmente es la tesis doctoral en teología del autor, defendida en el Ateneo Regina Apostolorum de Roma. A juicio del autor, "realicé este trabajo porque lo consideraba muy útil para los exorcistas y para que los teólogos pudieran profundizar en la teología del exorcismo".