Amenazado de muerte por sus enemigos, apenas respetado por sus correligionarios, hostilizado por las voces proesclavistas, Lincoln vive aislado en la Casa Blanca, cumpliendo a pesar de todo con su alto destino político.
Este sitio web utiliza cookies, tanto propias como de terceros, para mejorar su experiencia de navegación. Si continúa navegando, consideramos que acepta su uso. Más información