El liberalismo se caracteriza por la defensa de la libertad individual dentro de unas estructuras políticas lo más neutrales posibles. Este nace de la unión de los principios ilustrados con los del derecho natural de influencia cristiana y en España aparece durante el tiempo de las Revoluciones liberal-burguesas. Una época de cambios sociales que transita desde las Cortes de Cádiz hasta la dictadura de Primo de Rivera, pasando por episodios como la derogación de la Ley Sálica o la llegada al trono de Amadeo de Saboya, y todo ello, en el marco de la pérdida por parte de España de su condición de potencia colonial. Con el estilo preciso y didáctico que caracteriza al autor, esta obra es fundamental para comprender el liberalismo y su influencia en la historia de España que llega hasta el presente.