Hasta hace varios años, espiritualidad y mística eran incomprensibles fuera de la religión. Hoy, en cambio, frecuentemente se escuchan expresiones como espiritualidad laica o mística salvaje. Vivimos tiempos diferentes, de una espiritualidad transreligiosa que es también transcultural, pues ha dejado atrás las fronteras de una sola cultura. La espiritualidad ya no se identifica de forma exclusivista con una religión, pero reconoce la transcendencia de las religiones como corazón que hace latir a personas y pueblos —sin actitudes dogmáticas, sin jerarquías tan rígidas, sin sumisión.
Espiritualidad transreligiosa trata la tendencia actual a recrear la experiencia y la reflexión espiritual de una forma libre, desprejuiciada, a la vez que comprometida y profunda. Vicente Merlo conjuga nuestra herencia religiosa con la psicología transpersonal y la sabiduría oriental —principalmente el hinduismo y el budismo— para elaborar un paradigma de pensamiento integral a la altura de la importante transformación de la conciencia que atraviesa la sociedad contemporánea.
