París, erigida sobre dos milenios de historia, es una ciudad para enamorarse y también para fotografiarla. Esta guía visual de la metrópolis francesa captura el espíritu chic de la ciudad mediante cientos de imágenes seleccionadas meticulosamente, que abarcan desde algunas de las primeras fotografías de París, tomadas por Louis Daguerre y Henry Fox Talbot, hasta imágenes icónicas de su moda, arte y arquitectura.
París, ciudad construida en dos milenios de historia, entra en el tercer siglo de su romance con la fotografía. Fue a orillas del Sena donde Niépce y Daguerre alumbraron oficialmente este nuevo arte que, desde entonces, ha florecido desarrollando un lenguaje distintivo y se ha convertido en una herramienta vital de conocimiento.
París. Retrato de una ciudad nos conduce a través de la que Goethe describió como "una ciudad universal donde un paseo por un puente o una plaza evoca un gran pasado, donde en cada rincón se ha vivido un fragmento de la historia". La historia de París se vuelve a narrar a través de fotografías que comprenden desde los primeros pasos de Daguerre hasta las imágenes más recientes —un registro casi exhaustivo de más de un siglo y medio de transformaciones y un amplio panorama que abarca más de 600 páginas y 500 fotografías. Esta obra reúne el pasado y el presente, lo grandioso y lo cotidiano, objetos y a personas. Las imágenes captadas por célebres fotógrafos, entre los que se encuentran Daguerre, Marville, Atget, Lartigue, Brassaï, Kertész, Ronis, Doisneau y Cartier-Bresson, así como también por un buen número de autores desconocidos, intentan embotellar un poquito de esa atmósfera parisina, algo de esa poesía particular que emana de las piedras y de los habitantes de una ciudad que muda constantemente y que ha inspirado a tantos escritores y artistas a lo largo del tiempo.
París. Retrato de una ciudad es un estimulante mosaico de imágenes del pasado y el presente, un estudio fotográfico inmenso y único que, en cierto modo, es el verdadero álbum familiar de todos los parisinos. A ellos y a todos los amantes de esta ciudad capital es a quienes está dedicado este testimonio vibrante, afectuoso y tierno.
