1890, la Toscana. La casualidad vuelve a reunir a dos eternos enamorados separados por el honor y el deber, que siguen interponiéndose entre ellos. Segundo libro de la trilogía de novelas románticas iniciada con Una dama nunca miente.
Este sitio web utiliza cookies, tanto propias como de terceros, para mejorar su experiencia de navegación. Si continúa navegando, consideramos que acepta su uso. Más información