Isabel lleva años trabajando como asistenta para distintas casas adineradas de Madrid, aguantando miradas altivas y comentarios desagradables hasta el día que, en un arrebato de rabia -¿quién no lo ha vivido alguna vez?- mata a una de esas mujeres de buen vestir y malos modales. Ese acto tan atroz la hace sentir más especial y viva que nunca, tanto que no piensa parar... La pluma afilada de Carlos Augusto Casas consigue, con esta novela, la que podría ser una de las mejores protagonistas del noir español. Inteligente y explosiva, Amoniaco deja huella en un lector que será incapaz de separarse de estas páginas repletas de odio, realidad y justicia.