TELL EL-FAR´A

TELL EL-FAR´A. ARQUEOLOGIA EN PALESTINA 2017-2019

Editorial:
SOCIEDADE LUSO-GALEGA DE ESTUDOS MESOPOTÁMICOS
Materia
Fotografia documental
ISBN:
978-84-09-11689-8
Encadernación:
Rústica (Tapa blanda)
-5%
15,00 €
14,25 €
IVE incluído
En stock
Añadir a la cesta

Los últimos trabajos han aportado novedades sobre la dominación asiria en la región y sobre la datación absoluta de la Edad del Hierro en el Levante oriental.

El próximo 5 de octubre el equipo del proyecto de Tell el-Far’a pondrá rumbo a Palestina para llevar a cabo la tercera campaña de excavaciones.

Tell el-Far’a, investigaciones arqueológicas en tierras de la Biblia

Tell el-Far’a es un yacimiento arqueológico, situado al noreste de la ciudad de Nablus (Cisjordania), que el orientalista estadounidense William Albright propuso identificar, en 1931, con la antigua ciudad bíblica de Tirsá (citada hasta 17 veces en el Antiguo Testamento). Posteriormente, el padre Roland de Vaux, director de la École biblique et archéologique française de Jerusalén, desarrolló en Tell el-Far’a un loable proyecto de investigación arqueológica entre 1946 y 1960. Las nueve campañas de excavación del equipo francés permitieron documentar una larga secuencia histórica formada por siete grandes períodos: entre el Neolítico Precerámico y la Edad del Hierro (ca. 8500-600 a.C.).

Tell el-Far’a es, por su indiscutible relevancia histórica, un lugar merecedor de nuevas investigaciones arqueológicas para avanzar en el conocimiento de la antigua Palestina entre el nacimiento de las primeras ciudades (ca. 3000 a.C.) y la conquista de la región de Samaría por las tropas del Imperio neoasirio (ca. 720 a.C.). Por esta razón, en 2016, la Universidade da Coruña, la Universidade Nova de Lisboa y el Ministerio de Turismo y Antigüedades de Palestina firmaron un convenio de colaboración científica para iniciar una nueva etapa de investigación. Tras 57 años de abandono, con el apoyo de la Fundación Palarq, un equipo hispano-luso-palestino regresó a Tell el-Far’a, en 2017, con el objetivo de recuperarlo para la ciencia.

El nuevo proyecto arqueológico en Tell el-Far’a tiene programado poner en marcha las siguientes líneas de estudio: la arquitectura, el urbanismo, la cultura material, la secuencia cronológica absoluta, el dominio territorial, los contactos comerciales, la flora, la fauna y los recursos naturales. Además de la investigación científica, está previsto llevar a cabo varias actuaciones encaminadas a la conservación, la restauración y la musealización del yacimiento arqueológico en el marco de una iniciativa de desarrollo local.



Izq. Lámpara de aceite de la Edad del Hierro “in situ” (ss. VIII-VII a.C.). Foto: José Pardo.

Dcha. Botellita de cerámica negra de la Edad del Hierro (ss. X-IX a.C.). Foto: José Pardo.

Los trabajos de la campaña de 2018 se centraron en el estudio de la arquitectura y de la cultura material correspondientes a la Edad del Hierro (ca. 1000-700 a.C.). El análisis de la documentación e información obtenidas en la última campaña nos permite apuntar, por el momento, la existencia tres fases de ocupación durante la Edad del Hierro (siglos X y VII a.C.). La fase más reciente se corresponde con la conquista del lugar por los asirios. A este período pertenece un tipo de vaso de cerámica, inspirado en prototipos de metal, que se interpreta como un objeto de lujo usado para beber vino. Esta cerámica fue exportada desde Assur, en el valle del Tigris, entre los siglos VIII-VII a.C. hasta Palestina. Su presencia en Tell el-Far’a hay que vincularla con la toma de Samaría por los ejércitos de los reyes neoasirios Salmanasar V y Sargón II (ca. 722-720 a.C.), citada tanto en las inscripciones cuneiformes como en la Biblia.

Hasta la fecha, la cronología de la ocupación correspondiente a la Edad del Hierro en Tell el-Far’a se había establecido a partir del estudio comparativo de la cerámica con otros yacimientos. Sin embargo, gracias a los trabajos realizados en 2018 por el nuevo proyecto se han podido obtener, por la primera vez, varias dataciones absolutas radiocarbónicas (Carbono 14). Los resultados de las primeras muestras estudiadas han sido muy novedosos, pues apuntan una datación en el siglo X a.C., es decir, casi un siglo más antigua de lo propuesto por los investigadores para ese nivel arqueológico de Far’a. Para poder confirmar esta nueva cronología, y evaluar su repercusión desde el punto de vista histórico, será necesario obtener más muestras de material orgánico para datar en la próxima campaña arqueológica.

">